En España hay una gran crisis, como bien en otros casos ya hemos mencionado, la crisis económica afecta cada vez más el bolsillo de los españoles
La semana pasada el IVA pasó del 18% al 21% disparando los precios de los productos cotidianos.
De todas formas, las medidas del Gobierno español para enfrentar la crisis, afectan a los ciudadanos.
Tengamos en cuenta que el aumento del IVA es una de las medidas del gobierno de Mariano Rajoy para reducir el déficit público a 6,3% del PIB, pero muchos españoles e inmigrantes que viven en ese país se han mostrado en franco desacuerdo con la medida, por considerar que los afecta más de lo que los puede beneficiar.
En cuanto a la crisis de precios la cual puede convertir a España en un país importador de leche.
El ministro Arias Cañete deja entrever que la subida de las materias primas podría llevar al cierre a miles de explotaciones.
Por empezar el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, mostró su convencimiento de que si continúa el descenso de los precios en origen en el sector lácteo y el incremento de los precios de las materias primas para la alimentación animal, España podría convertirse en «un importador neto de leche comunitaria», al verse abocadas miles de explotaciones lácteas al cierre, por lo que serían otros países productores de leche «nos impondrían los precios desde el exterior».
Tras reunirse en la tarde de ayer con la Asociación Interprofesional Láctea (Inlac) y representantes de la distribución, para analizar los problemas que afectan al sector lácteo, Arias Cañete calificó este sector como «clave y estratégico» en la política agraria del Gobierno, que según añadió, tiene un componente social de «máxima dimensión» dado que ciertas zonas rurales dependen exclusivamente de este negocio para poder subsistir.
Sin embargo, en cuanto a el ministro de Agricultura avanzó, este mismo sucedió según recoge la agencia Europa Press, que el Gobierno pretende alcanzar un acuerdo de «buena voluntad» entre productores y grandes distribuidores para buscar soluciones a la crisis del sector, mientras se tramitan las respectivas medidas legales, como el Real Decreto que traspone la normativa europea sobre el sector lácteo y la ley de la cadena alimentaria.
El ministro francés, Stéphane le Foll, con quien habló, es «consciente del problema» y aseguró que su país también abordará en el G20 la necesidad de frenar la volatilidad de los precios mundiales de cereal.
«No queremos ni reducción de cabaña ni del número de productores», subrayó Arias Cañete, tras recordar que el sector ya ha pasado de las 141.000 explotaciones que existían en 1991 a apenas 22.000 en la actualidad, con una reducción de casi la mitad en el número de vacas lecheras, desde 1,5 millones a 873.000.
En cuanto a la responsabilidad de todos los sectores de la cadena ante una situación «de enorme gravedad», pues los precios que actualmente reciben los productores no cubren los costes, «y eso pese a que existen ayudas compensatorias». Y también, pidió a la distribución que no utilice la leche como producto de reclamo, porque eso hace que la industria baje los precios a los productores.